Lo expresamos hace una semana, el futbol tiene esos «que sé yo», esas altas y bajas que marcan los resultados. Y Nacional ayer no pudo escapar a ello.
También dijimos que no iba a ser tarea fácil – busque en archivos – porque este Boca aún muy deteriorado futbolísticamente a la fecha, cuando sale a la cancha, por lo menos tiene claro que debe realizar un buen papel.
Nacional cayó tal vez sin merecerlo, pero …esto es fútbol, la metió Riquelme, la tiró muy afuera Alonso y allí radicó la diferencia. Sencillo, asi de simple. Categoría, templanza y confianza de un jugador, que a UD. le puede gustar o no, pero no puede negar que es «diferente», y en este fútbol actual donde muy poquitos piensan, «caminando» muchas veces se hace notar: Juan Román Riquelme.
Nacional sigue primero en su grupo de cualquier manera, con el agravante de que se acortaron las diferencias, y el «paisaje» que muestra la tabla no es el mismo.
Sigue primero sí, y aunque pese a muchos,- y también varios quieran «vender humo» – el de ayer no era un partido más, era la clasificación.
Sigue primero si, y la chance está intacta, depende de sí, como al principio, pero todos sabemos que el «paisaje» en la tabla y lo que se viene por delante cambió, porque ayer no era un partido más, faltando dos por jugar en la serie.
Nacional jugó con un hombre más durante 70 minutos, un partido que, tuvo un trámite que volvió a mostrar cuanto les cuesta a los equipos uruguayos a la hora de generar espacio, tocar, rotar, cambiar el frente del campo para aprovechar la superioridad numérica.
Lo dijimos al comienzo, tal vez no mereció perder por la actitud, por esos últimos 15 minutos, que siempre quedan en la retina, dónde el tricolor fue a buscar a como diera lugar; aún sin aprovechar de la mejor manera la entrada de Abreu; y se encontró con la figura de Orión, tal cual Nacional se encontró con Bava en La Bombonera.
Estuvo cerca el tricolor, pero deberá cambiar muchas cosas el técnico Blanco si quiere mejorar.
Lo del «Hueso» Romero, salió medianamente bien el juego anterior, pero no es para jugar donde jugó, Albín no ha colmado las expectativas desde su llegada, creemos que Recoba, «caminando», como lo hizo Juan Román del otro lado es mucho más, y en este fútbol «nuestro» dónde no hay nada que inventar – en otros tampoco, pero menos acá -, en este Nacional, Abreu estando pleno físicamente tiene que jugar.
Habrá que ver como repercute este resultado en el plantel, porque repetimos, sigue primero Nacional en el grupo, pero el panorama es otro, en la intimidad el jugador sabe que ayer, no era un partido más.
Ahora se viene Fenix por el Clausura, donde el tricolor si quiere seguir prendido arriba y no perder de vista la posibilidad de forzar una definición por el Uruguayo, no puede perder puntos, el encuentro se jugará en el Centenario a partir de la hora 18, donde oficia como local en la oportunidad el conjunto de Capurro.