La gente, el común denominador de los espectadores que concurre al fútbol, no sabe y se pregunta, ¿quién designa a los árbitros?
Supuestamente PERSONAS IDÓNEAS, con la capacidad de decidir para tal o cual partido, el perfil, la personalidad, mas allá de lo técnico; quien será cada encuentro el encargado de impartir justicia -ser justo- sin echar por tierra el trabajo de todo una año o el logro de algún objetivo por un mal trabajo arbitral.
Y esto no quiere decir que no se equivoquen, claro que se van a equivocar, todos nos equivocamos, pero el error no puede estar en la dualidad de criterios; en el no saber aplicar una ley de ventaja, sancionar, como dice la canción, «a veces si a veces no» una misma jugada, en resolver disciplinariamente de mil maneras distintas una misma situación; y tantas otras cosas que darían para escribir un libro.
Pero quién, me pregunto yo, una vez al mes, los instruye. los corrige, le brinda las armas para que cada domingo no sea un suplicio y por ahí embocar un buen arbitraje o de mediano nivel.
Porque si hay alguien, indudablemente sabe muy poco de este negocio, y si no hay; creo que hay en el ambiente del fútbol gente con capacidad en ésta área como para aportar y mucho.
Pero en este contexto, también me pregunto, ahora yo, como se puede preguntar la gente …le sirve a los Clubes o a algunos Clubes, mejorar el arbitraje, jugar con el reglamento a «rajatablas» como debe ser, en lo técnico, en lo disciplinario, o como estamos en el país de los vivos, mejor si me arbitra Fulano porque lo converso, o Sultano; porque a Perengano no se anima a echarlo, y trato a mi manera de sacar alguna ventaja; y el día que esto me juega en contra, chillo y pataleo.
Queremos mejorar realmente el fútbol , o como reza la frase – «al pueblo pan y circo» – porque jugar se juega, delo por seguro, porque para muchos, aunque Ud. no lo crea; aquí en el interior también es una manera de posicionarse en diferentes ámbitos, y hay quienes lo encaran como un deporte (como debe ser), y otros como deporte-política (trampolín para acomodarse en algún estamento) que a través de algún vínculo me pueda servir para usufructuar algún cargo de relevancia.
Por eso este fragmento de hoy, porque después criticamos a los «hombres de negro», que sin dudas no pasan por su mejor momento generacional. ¿Pero son sólo y sólo ellos los culpables, o son «el hilo mas fino»?
Una vez mas, y ahora yo también me pregunto como se pregunta la gente común, el hincha que quiere disfrutar de su equipo domingo a domingo, ¿quien designa los árbitros? ¿Qué se mueve detrás?
Alcanza solamente con tener un título de Instructor de la OFI, o habrá que sumarle un poquito mas.
Está bárbaro la parte teórica, que no difiere mucho de la de un árbitro, bárbaro el conocimiento que se tenga para instruir, pero en la práctica, tú ¿que enseñas?; ¿con que autoridad, con qué capacidad adquirida, que fue lo que viviste, que fue lo importante que arbitraste -como central, pues aquí nos enfocamos en los malos arbitrajes- para poder transmitirlo a aquellos que arrancan en el arbitraje, y puedan tener una dirección clara en cuanto a como manejarse y resolver determinadas situaciones en el terreno de juego?
Por eso no me afilio a las frases hechas, como esta que hace un tiempo también vengo escuchando como que: «no hay árbitros», «no salen nuevos jueces». Yo creo que hay, y aún entre los que hasta hoy han tenido actuaciones impresentables, algunos, hay árbitros, que se podrían corregir, superar, adiestrarlos y proveerlos de cosas esenciales que tiene que tener alguien encargado de controlar un juego y tratar de ser justo, nada mas que eso.
No es tan difícil. Pero sigo preguntándome al igual que Ud., ¿quién designa, analiza, corrige, evalúa, testea e imparte conocimientos a los actuales árbitros?
Con lo que Ud. ve partido tras partido, saque sus propias conclusiones.