Comunicado de Prensa
Prof. José Luis PITTAMIGLIO – Edil Departamental Partido Socialista (FA)
Desde hace unos años funcionan una serie de convenios entre el Ministerio de Vivienda y las Intendencias para otorgar préstamos para refaccionar viviendas. En Colonia nos hemos visto beneficiados con unos cuantos préstamos de este tipo, mediante los cuales muchas familias han logrado refaccionar sus viviendas pagando préstamos que resultan muy convenientes para las posibilidades de los trabajadores. Esta es una iniciativa que me parece muy buena y que no se había dado nunca en los gobiernos anteriores al 2005. Por ejemplo la línea de préstamos para rehabilitación urbana firmado en 2011, para recuperación y mantenimiento de viviendas, permitió que 46 familias de Juan Lacaze accedieran a dicho beneficio, 10 familias de Conchillas, 29 de Carmelo y 8 familias de La Paz. El Gobierno Nacional aportó en ese momento 19.200 unidades reajustables (unos 630 mil dólares) para prestar a las familias y así lograron el objetivo de hacer importantes reparaciones en sus viviendas. La segunda parte de este convenio de rehabilitación urbana está en ejecución y los préstamos nuevos corresponden a 31 familias de Nueva Helvecia, 24 de Nueva Palmira, 26 de Tarariras y 29 familias de Rosario. Esta segunda entrega del gobierno nacional fue de 32600 UR, un poco más de un millón de dólares. En estos días se está difundiendo por parte de la Intendencia un nuevo llamado para estos préstamos, aunque cualquiera que lo escuche o vea los avisos en los diarios, puede llegar a pensar que los préstamos los otorga la propia Intendencia de Colonia. Nada más alejado de la realidad.
El mecanismo que se adoptó para estos préstamos consiste en que el Gobierno Nacional pone la plata y cada Intendencia se encarga de cuestiones más bien operativas: promueve el acceso a los préstamos y controla que las obras efectivamente se realicen. Pero me imagino que estaremos todos de acuerdo en que lo más importante es que la plata esté disponible. Quiero decir: si la plata no está, todo lo demás no tiene sentido. O sea que en esta especie de convenio entre el Ministerio de Viviendas y las Intendencias, no queda la menor duda que el aporte que se hace desde el gobierno nacional es mucho más importante que el que se hace desde la Intendencia de Colonia.
Sin embargo, quien haya estado atento a los medios de prensa del departamento en esta última semana, seguramente habrá escuchado y leído que algunas de las máximas autoridades de la Intendencia de Colonia –por ejemplo el intendente interino doctor Miguel Asqueta- han pretendido “vender” la idea de que se trata casi casi de una tarea exclusiva de dicha Intendencia. Incluso hasta le pusieron un nombre similar al que utiliza la propaganda de la administración Zimmer en Colonia: acá el programa de refacción de viviendas se llama “Colonia renueva”, un nombre que suena parecido al “Colonia mueve” que nos repiten hasta el hartazgo en la propaganda oficial.
Es decir que con plata del Ministerio de Vivienda, la Intendencia de Colonia se hace la fiestita y sale por los medios a hacer creer que este programa de refacción de viviendas es de su propiedad, cuando en realidad lo que hace la gente de Zimmer es solo controlar que las obras se hagan (con plata del Gobierno Nacional). Eso se llama hacer un buen aprovechamiento del laburo de los demás. ¿Para qué voy a trabajar, si puedo adjudicarme el trabajo de otros?, parece ser la pregunta que lanzan desafiantes los representantes del Partido Nacional que en estos días llenan los medios de prensa.
Es una suerte que muchas familias colonienses hayan podido aprovechar este préstamo del gobierno para refaccionar sus viviendas y ya se ha vuelto costumbre ver cómo la administración del Partido Nacional en Colonia busca aprovechar la volada para llevar esa agua para su molino. Tal vez sería mejor que dedicaran un poco de esfuerzo a arreglar calles, a tapar pozos, a limpiar cunetas y se preocuparan menos por adjudicarse trabajo ajeno.