Según informó ayer el Semanario Búsqueda, el presidente José Mujica y varios jerarcas del gobierno sabían desde 2011 que el ex director de ASSE, Alfredo Silva, andaba en “cosas raras”. Recibían carpetas y papeles fotocopiados.No solo lo tenían en la mira por su vínculo con la empresa La Buena Estrella sino que también tenían informes de otras “desprolijidades” como presiones a directores de hospitales y hasta visitas a cines pornográficos en autos alquilados por el Estado.
“Teníamos indicios, pero nada probado. La Justicia tiene mejores herramientas para investigar este tipo de irregularidades”, dijo el presidente José Mujica a Búsqueda. No obstante, en mayo de 2011 el presidente puso el tema sobre la mesa en el Consejo de Ministros y tras una investigación del MSP terminó sustituyendo al entonces presidente de ASSE, Mario Córdoba, y luego al gerente general Enrique Buccino y al gerente administrativo César González.
El caso llegó a otros integrantes del Frente Amplio: “Es un desconche, es un quilombo”, comentó en 2012 el socialista Daniel Martínez a otros parlamentarios. Siempre de acuerdo a la versión de Búsqueda, Silva negó ante el PIT-CNT cada una de estas acusaciones, entonces, la central sindical optó por defenderlo y el gobierno por meter “violín en bolsa”.