Entre 2013 y 2014, en Montevideo se encontraron en volquetas, o en lugares abandonados, seis cuerpos, algunos fetos y otros bebés que alcanzaron el término de la gestación, y no se sabe por qué tuvieron ese final. Estos seis casos que recopiló El Observador están bajo el rótulo de “casos fríos”, como los llama la Policía. Se hallan, se registran, pero la investigación no consigue avanzar por falta de pruebas o testigos, y quedan sin resolverse.
En setiembre de este año, el Ministerio del Interior creó la Unidad de Análisis de Hechos Complejos, integrada por 15 policías que tienen por objetivo resolver los casos que aún conservan un signo de interrogación.
Los casos de fetos y bebés aparecidos en volquetas integran el conjunto de 200 casos sin resolver en todo el país en los que esta unidad trabaja para aclarar.
Junto a la jueza penal Julia Staricco, esta unidad busca analizar la totalidad de los casos de fetos y bebés para determinar si existe o no alguna conexión entre ellos. Por lo pronto, la clave para la resolución de los mismos parece estar en que aparezca un ADN que permita conectar a las víctimas con los responsables.
Según información recibida por El Observador, los investigadores que trabajan en estos casos realizan una diferenciación: cuando se trata de fetos, y cuando se trata de bebés que alcanzaron a nacer. Y es que las causas para los imputados son diferentes. Cuando se hallan fetos, se está frente a una investigación por realización de un aborto clandestino mientras que cuando se hallan bebés que completaron su ciclo de gestación y nacieron, se está frente a un caso de infanticidio.
En el 2012, el Parlamento aprobó la despenalización de la interrupción del embarazo. Hasta ese entonces, las mujeres con un embarazo no deseado recurrían a clínicas que trabajaban en la clandestinidad para concretar un aborto. Esa práctica elevaba el riesgo de muerte materna por aborto inseguro.
En Uruguay se estimaba que habían 33 mil abortos al año. Sin embargo, en el primer año de implementación de la ley que habilitó la interrupción del embarazo en los centros sanitarios de todo el país, las autoridades del Ministerio de Salud Pública constataron que hubo 6.676 abortos en todo el país (556 por mes).
El informe presentado a comienzos de este año por la cartera de salud mostró que la mayoría de los abortos fueron realizados en Montevideo (64%), en el sector privado de salud (59%), y que 18% del total correspondieron a adolescentes menores de 19 años.