Hoy es un dia de gran tristeza para mi y para mi querido pueblo, se esta editando para publicar la ultima edición de su historia (y vaya si tiene historia) del centenário Diário HELVECIA de Nueva Helvecia, departamento de Colonia, República Oriental del Uruguay, fundado en 1914.
Aun sintiendo la tristeza de saber que será la última edición de Helvecia, mi agradecimiento infinito por la delicadeza de su Director Alfredo Stutz de acordarse de este humilde ex trabajador de ese increíble medio de prensa para comunicarle el triste acontecimiento.
Como nada de lo humano me es ajeno, no puedo ocultar la ambiguedad de sentimientos que me invaden al conocer la noticia: la tristeza de saber que ya no tendremos Helvecia en las calles, en los kioscos, en los bares, en los clubes, y por otra parte la alegria de que un empresario periodistico con mayusculas como lo fue y es el señor Stutz, despues de toda esa vida de trabajo, esfuerzo y entrega a la causa del periodismo, se retire a descansar merecidamente junto a su señora Araceli y a disfrutar de sus hermosos nietos con más tiempo.
Helvecia, ese maravilloso medio de prensa que me permitio recoger un cierto prestigio como Periodista Deportivo, conocer el Uruguay de punta a punta, cosechar innumerables amigos, y también algun enemigo, quedará para siempre en el recuerdo de la cultura helvética, coloniense, uruguaya, por su permanente aporte al acervo del país.
Solo me resta agradecerle al señor Stutz, la enseñanza permanente, el apoyo constante e incondicional en situaciones familiares y particulares limites que me tocaron vivir en esos 20 años, el permanente cumplimiento económico y la seguridad laboral ofrecida, y el respeto constante,aún en conocimiento de los ideales políticos que me acompañaron siempre.
El gran abrazo a mis queridos ex compañeros de trabajo,periodistas, técnicos, imprenteros, canillitas, personal de administración. Que por otra parte deben estar viviendo momentos de gran tristeza.
Muchas gracias Alfredo y a todos.
El saludo fraterno, y para Alfredo Stutz, que no necesita que sea quien esto escribe que se lo diga, pero no puedo dejar de expresarlo porque lo siento así: retirese a descansar con la conciencia bien tranquila, su aporte al periodismo, a la cultura y a la sociedad ha sido invalorable, constante y de gran seriedad.
Juan Carlos Vecino Janavel – São José de Rio Preto, estado de São Paulo, Brasil.