En 1989 Tabaré Vázquez llega a la Intendencia capitalina y se empieza a perfilar como líder del Frente Amplio. En 1994 fue candidato de la izquierda, no sin antes pergeñar la creación del Encuentro Progresista que permitió el ingreso de dirigentes blancos y colorados.
Vázquez se quedó con la presidencia del Frente Amplio en 1996 tras la renuncia de Líber Seregni. En 1997 el edil tupamaro Julio Zabalza se negó a votar la privatización del Hotel Casino Carrasco y Vázquez renunció en protesta por esa actitud. Luego reasumió el cargo.
En 2004 el Frente Amplio llegó al gobierno de la mano de Vázquez. El romance entre el presidente y la Mesa Política se rompió cuando Vázquez vetó la ley de despenalización del aborto.
Tras la gestión de José Mujica, el Frente Amplio se quedó sin candidatos a la vista y fue a buscar a Vázquez nuevamente para ser candidato presidencial.
La segunda presidencia de Vázquez comenzó con problemas. La declaración de esencialidad de los servicios de enseñanza pública puso en pie de guerra a la mayoría del Frente e hizo retroceder al mandatario.
El triunfo de Mauricio Macri en la Argentina volvió a separar al presidente Vázquez y a la mayoría de la fuerza política.
Durante la campaña electoral de 2014 Vázquez dijo que el Frente Amplio es una fuerza de centroizquierda. Una vez asumido el gobierno les dijo a sus ministros que las políticas del gobierno debían dar “un giro a la izquierda”.
En la Mesa Política y en el Secretariado Ejecutivo del Frente Amplio ya son habituales las críticas al Poder Ejecutivo debido a su falta de coordinación con la fuerza política. La Mesa tiene pedida una reunión con Vázquez que aún no fue concedida.
FUENTE: El Observador