Las precipitaciones que sufrió Rocha hicieron que dos localidades del departamento estén completamente aisladas y que solo se pueda acceder a ellas desde el aire o mediante gomones o lanchas. Se trata de Barranca y Villa Cebollatí, al norte de Rocha, la zona más «complicada» por las inundaciones, según dijo Anibal Pereyra, intendente del departamento a El Observador.
El escuadrón nº5 de helicópteros de la Fuerza Aérea Uruguaya comenzó el viernes a sobrevolar el área con bomberos para rescatar personas en emergencia o trasladarles alimentos, agua, medicamentos y ropa a las familias aisladas.
Mediante contacto por celular las personas enviaban su ubicación para que les llevaran suministros. Si los helicópteros no lograban aterrizar porque el terreno estaba inundado, les tiraban las provisiones desde muy baja altura. Al menos 20 personas están refugiadas en una escuela, que es el punto más alto de Villa Cebollatí, el único lugar -junto a la comisaría- donde todavía no llegó el agua, según manifestó Pereyra a El Observador.