La empresa Terminales Graneleras Uruguayas (TGU) amplió su capacidad operativa en el puerto de Nueva Palmira, en el departamento de Colonia, a través de una inversión de US$ 25 millones que incrementó sus instalaciones en la terminal y que inauguró de manera formal ayer; según informa El Observador.
La firma –que se dedica a ofrecer servicios a empresas relacionadas con el comercio exterior de granos y subproductos– instaló un módulo nuevo en el puerto (con cintas, balanzas y un transbordador), llevó adelante la construcción de tres silos más para almacenar hasta 10 mil toneladas cada uno, además de desarrollar una plataforma volcadora para camiones y un segundo puesto de descarga de barcazas en el muelle costero.
La obra permitió que la velocidad de carga a buques trepara de 800 a 1.400 toneladas por hora. Por su parte, la descarga de camiones subió de 650 a 1.050 toneladas por hora, mientras que la descarga de barcazas pasó de 600 a 2.100 toneladas por hora.
El presidente de TGU, Christian Bolz, destacó durante su intervención en el acto de inauguración, que las obras, iniciadas 18 meses atrás, no habían parado las actividades en el puerto «ni un solo día». También apuntó a la «visión de largo plazo» detrás de este emprendimiento, que transformó a la terminal en un «muy moderno puerto a nivel internacional».
Asimismo, aprovechó la presencia en primera fila del presidente de la Administración Nacional de Puertos(ANP), Alberto Díaz, para manifestar el deseo de la empresa de que la terminal de Nueva Palmira llegue a 12 metros de calado.En diálogo con El Observador al término del evento, Bolz dijo que visto que el puerto de Montevideo «está yendo a 12» metros de calado, «sería bueno que Palmira tenga un dragado».
Pero esto, aclaró, es en coordinación con Argentina. «Trabajamos muy integrados con la ANP en eso para ir transitando ese camino», afirmó. Hoy hay alrededor de 10,5 metros, explicó Bolz.
El empresario comentó que la profundización del calado permitiría que los barcos salgan con sus bodegas llenas de Nueva Palmira, en lugar de tener que completar sus cargas en puertos argentinos o brasileños.
«Es muy importante: el barco llega un momento que ya lo llenaste y ya no admite más carga y el calado lo limita», señaló. TGU tiene la concesión para operar en el puerto coloniense desde 1999, la cual fue renovada en 2014 por 15 años más.
EL OBSERVADOR – Por Mayte De León