OPINIÓN – Recientemente a través de El Espectador – como se viene haciendo en distintos medios y con diferentes actores – se realizó una entrevista a Andrés Scagliola, coordinador de la Secretaría de la Diversidad de la Intendencia de Montevideo; y Juan Pedro Mir quienes debatieron acerca de implementar una guía educativa sobre diversidad sexual en el ámbito educativo que anima a docentes a no ocultar su orientación sexual, no “estar en el armario” y hablar abiertamente de diversidad y sexualidad con estudiantes.
Nos parece respetable y hasta atendible si se quiere. Pero también hay que decirle a estos señores y a muchos eruditos que andan por el mundo; que deben remarcarle a su vez a los chicos, determinados «valores morales», -que por que yo los transgreda no mutan- que son aquellos que marcan lo normal como normal ; y lo natural-natural y lo antinatural-antinatural.
Y con esto no se pone a nadie en la hoguera, ni se discrimina – «palabra de moda»- ; ni se los aparta en un campo de concentración ni nada por el estilo; para gradualmente insertar modalidades o costumbres -que las quieren aparecer como normales y no lo son, aunque respetables-; en un mundo que indudablemente va «barranca abajo» y una Educación -no en su totalidad- en muchos casos con un «libre albedrío» palpable que dista mucho de la libertad genuina.
Por eso… hay gente que en el discurso parece convencer, y más aún en un mundo «agobiado»; ganado por el desinterés; y donde la gente cuando quiere acordar ya tiene las normas impuestas, los decretos firmados, donde paulatinamente van ganando terreno aquellos para los cuales «todo está bien» – no es así, no todo está bien – y después «a llorar al cuartito».
Por eso… ¿Ud. se preguntó, quién, quienes le van a hablar de qué y cómo, con qué autoridad de determinados temas a sus hijos?, en la escuela , en el liceo; cuando tal vez muchos no tengan resueltos sus problemas de padres en sus hogares, arrastren conflictos sistemáticos de conducta, sociales, psicológicos, existenciales y más… y después se paren frente a un grupo, tratando de amoldar o querer trasmitir ciertos «modismos» a quienes no los comparten -pueden respetarlos-, y tener que bancárselos.
Cuidado!!! en el mundo «del vale todo»…gradualmente, una filosofía que viene avasallando, de gran nombre y mucho poder está torciendo o queriendo torcer conductas… cuidado, no sea tan indiferente y vea de que se tratan las «novedades” que poco a poco se van introduciendo en el plano social, sea laboral, educativo , de la salud, etc. No hay por qué, decir a todo que sí. Se puede con Autoridad, NO AUTORITARISMO, remarcarse lo que no sirve o lo que no conviene.
Deberíamos estar más despiertos, más alertas… ¿quién o quienes le van a enseñar, de qué, como, con qué autoridad moral a sus hijos, nuestros nietos, y los que vengan…? Están todos preparados…o preparamos a todos con un mismo discurso.
Alex Hernández