No para generar alarma pública; pero si «una alerta amarilla social» -para tomar severas precauciones- en lo que hace a una zona este del departamento de Colonia (Nueva Helvecia – Valdense – Costa del Inmigrante) que viene siendo azotada -y no es un sensación- por severos incidentes en materia de robos, y hoy día ya no de los llamados «comunes».
Días pasados una Automotora de la ciudad de Nueva Helvecia se vió vulnerada y al estilo de las mejores películas «los amigos de lo ajeno» sustrajeron dos vehículos destrozando el local en su retirada; una ola de robos en las playas, también en Valdense se sumaron a los datos estos días; algunos aclarados, otros no, en la imágen podemos apreciar lo sucedido en los últimas horas en un comercio céntrico del Municipio helvético, donde nuevamente de manera violenta y ante la rotura de
vidriera del frente se suscita otro hecho desgraciado en lo referente a la crónica policial.
Los datos oficiales parecen querer hacernos ver o contar otra cosa; pero la realidad no da lugar a dudas que aquí al menos en esta «micro-región» no vamos bien; y las cifras son altamente negativas en el saldo de la ciudadanía.
Si alguno quiere mirar para el otro lado, hacer caso omiso, quitarle trascendencia a estos eventos delictivos -pueden hacer lo que les plazca- no los vamos a aplaudir, sino sí; exigirles las máximas garantías que tiene un ciudadano en cuanto al derecho a ser «salvaguardado», cuidado, protegido, por aquellos a quienes corresponde; y aquí la injerencia no comienza por el funcionario policial común. Por eso lo del principio …»para abrir los ganchos».