Uruguay se coronó Campeón Sudamericano Sub 20, y va al mundial de Corea como en los viejos tiempos después de 36 años; primero, y coronándose en el mismo suelo; tierra ecuatoriana. Despúés vendrá el tiempo del análisis, de los por menores del torneo; de los detalles; este es tiempo de un Uruguay CAMPEÓN con altos y bajos -pegando en momentos justos- con una columna clave, un cimiento firme, arrancando por Mele, pasando Viña; las duplas Bentancur – Waller; De La Cruz – Amaral, sin dudas los puntos más altos para nosotros en el certámen, y un Ardaiz que apareció en el partido exacto -con la chance de jugar otro Sudamericano- para ponerle el «broche de oro» con dos goles en el juego decisivo.
Es tiempo de euforia, de festejos, y vaya si bienvenidos sean; no de exitismo para nosotros. Uruguay es campeón: no quedaron dudas de que fue el mejor en este campeonato por encima de sus rivales. Una vez más los chicos celestes en el escalón más alto del podio por méritos propios -y no me sumo al verso «del proceso»- con un Bentancur exuberante, demostrando en el último juego que está despegado del resto; sin embargo se bajó del barco hace muy poquito para integrar el grupo -a puro fútbol- porque rompía los ojos con 17-18 años en Boca; y no había manera de dejarlo afuera.
Bien por Uruguay, por Coito; un técnico serio, estudioso, por los gurises que dejaron todo en la cancha y que despues de 36 años vuelven a levantar la Copa América de la categoría. Bien por el fútbol uruguayo porque «…sigue dando criollos el tiempo». Salud Campeones!!!