Líderes mundiales en salud trataron la biofabricación y las enfermedades tropicales desatendidas (ETD) durante la 72ª Asamblea Mundial de la Salud
– El evento se concentró en soluciones científicas y tecnológicas innovadoras para aumentar el acceso a medicamentos y productos biológicos.
DARMSTADT, Alemania, 22 de mayo de 2019 – Merck, empresa líder en ciencia y tecnología, condujo hoy un debate con motivo de la 72ª Asamblea Mundial de la Salud en Ginebra, Suiza. El panel, titulado «Leaving no one behind: from philanthropy to sustainable health solutions. How can decentralized manufacturing be part of an integrated approach to tackling NTDs and advancing Universal Health Coverage?» («Que nadie quede fuera: de la filantropía a soluciones sustentables en salud. ¿De qué manera puede la fabricación descentralizada ser parte de un abordaje integral para tratar las ETD y promover la Cobertura Universal de Salud?») contó con algunos de los principales expertos en políticas y salud del mundo:
Dr. Brett Giroir, Subsecretario de Salud de EE.UU.
Dra. Matshidiso Moeti, directora regional para África de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
Prof. Dr. Peter Hotez, decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical del Baylor College of Medicine (Texas, EE.UU.) y director del Centro de Desarrollo de Vacunas del Texas Children’s Hospital
Subhanu Saxena, director regional de Asociaciones en Ciencias de la Vida, Europa, de la Fundación Bill & Melinda Gates
Dr. Udit Batra, CEO, Life Science y Miembro de la Junta Ejecutiva de Merck.
«Merck tiene el compromiso de promover la investigación y el desarrollo en pos de la eliminación de enfermedades desatendidas y emergentes, tal como la esquistosomiasis, una de las parasitosis más comunes y devastadoras en países tropicales por la cual cada año mueren más de 280.000 personas», dijo Batra. «Nosotros, al igual que la Organización Mundial de la Salud, apuntamos a abordar estos desafíos globales y ofrecer una mejor calidad de vida».
El panel debatió el rol de la fabricación descentralizada como una estrategia para abordar el problema de acceder a medicamentos y productos biológicos y enfrentar las ETD. La fabricación de tecnologías sanitarias ha sido un objetivo de funcionarios en países en desarrollo en todo el mundo, quienes están trabajando con socios del sector privado para establecer la producción, según la OMS.
«Entendemos que, tanto de parte de nuestros socios como de los gobiernos, existe un fuerte deseo de acercar la biofabricación a los pacientes, donde sea que vivan, para aliviar el riesgo en la cadena de suministro, responder a enfermedades endémicas y fabricar a un costo aceptable o competitivo», señaló Batra. «Las soluciones de un solo uso y bioprocesamiento de hoy en día ayudan a que esa aspiración sea posible. Estamos preparados para apoyar a gobiernos y fabricantes a que desarrollen su infraestructura de biofabricación descentralizada para mejorar el acceso de los pacientes a productos biológicos y biosimilares que salvan vidas».
Desde 2007, Merck, a través de su sector de negocios Healthcare, apoya a la OMS en la lucha contra la esquistosomiasis en África. El tratamiento más eficaz para esta enfermedad a la fecha es Cesol® 600, un comprimido que contiene el ingrediente activo bien tolerado conocido como praziquantel. Merck produce los comprimidos en su planta en México y cubre los costos de transporte y logística que implica llevarlos hasta África, mientras que la OMS maneja, controla y documenta la distribución a nivel local.
Merck mantiene importantes colaboraciones con universidades e institutos de investigación líderes para ayudar a promover la industria de las vacunas en su totalidad, incluidos Baylor College of Medicine y Jenner Institute de la Universidad de Oxford.
La empresa mantiene dos colaboraciones separadas con Baylor College of Medicine, una a través de su división Life Science y otra a través de su sector Healthcare. En 2017, la división Life Science de Merck formó una alianza estratégica con Baylor para promover la investigación y el desarrollo de vacunas para infecciones desatendidas y emergentes. También en 2017, la división Healthcare de Merck dio inicio a una colaboración con el Instituto Australiano de Salud y Medicina Tropical (Universidad James Cook, Queensland) y Baylor para investigar nuevos biomarcadores para el desarrollo de vacunas y elementos de diagnóstico para la esquistosomiasis.
Acerca de las enfermedades tropicales desatendidas
Las enfermedades tropicales desatendidas (ETD) son un conjunto de 17 enfermedades que afectan desproporcionadamente a más de 1.000 millones de personas que viven sobre todo en el mundo en desarrollo. Como causa principal de discapacidad, las ETD generan cargas sociales y económicas. Sin embargo, según la OMS, muchas de estas enfermedades pueden ser controladas y, en algunos casos, eliminadas. Merck está comprometida con la investigación que tratará o incluso eliminará las ETD y ha intensificado sus esfuerzos para enfrentar las ETD como parte de su campaña para brindar acceso a la salud.
Acerca de la esquistosomiasis
La esquistosomiasis es transmitida por parásitos planos. Al nadar o lavar ropa en aguas contaminadas, las personas pueden contraer las larvas del gusano, que luego infectan sus órganos internos. El índice de infección es especialmente alto entre los niños, e incluso cuando no es fatal, las consecuencias son graves. En asociación con otras organizaciones como la OMS, Merck ha establecido el objetivo de eliminar por completo esta enfermedad.
Acerca de la Asamblea Mundial de la Salud
La 72ª Sesión de la Asamblea Mundial de la Salud (AMS) de la OMS se llevará a cabo en Ginebra, Suiza, del 20 al 28 de mayo de 2019. Delegaciones de todos los Estados Miembro de la OMS asisten a la AMS, la cual se concentra en un temario sanitario específico preparado por la Junta Ejecutiva. Las funciones principales de la Asamblea Mundial de la Salud son determinar las políticas de la Organización, designar al Director General, supervisar políticas financieras y analizar y aprobar el presupuesto propuesto para los programas.