Probar la variedad de deliciosos quesos y dulces en las laboriosas comunidades del Este de Colonia, de marcada influencia suiza y piamontesa, es más que un motivo para llegar a Colonia.
Visitar las tradicionales bodegas turísticas, con sus vinos de nivel internacional, siguiendo las más viejas tradiciones europeas.
Deleitarse con las especialidades criollas basadas en las mejores carnes del mundo.
Visitar los sofisticados restaurantes, con especialidades de todo tipo.
Conocer más y deleitarse con el aroma y el sabor inigualable del aceite de oliva extra virgen, elaborado con aceitunas que provienen de olivares que crecen en los suelos fértiles de Colonia, donde la fresca brisa del Río de la Plata los madura lentamente.
Todas ellas son algunas de las experiencias que hacen de Colonia – toda – ; de Este a Oeste ; de Norte a Sur ; desde la Costa del Inmigrante pasando por Nueva Helvecia; hasta llegar a Nueva Palmira un destino obligado para los amantes de los placeres gastronómicos y más…