TE ACORDÁS DE BIANCHI…? SEÑALADO; CONDENADO SOCIALMENTE… Y AHORA; QUÉ HACEMOS?
Porque Bianchi era un político. Recuerdo a Squerra. Algún otro. Porque son muchos los que «se emborrachan».
Y le erraron fierazo.
A Bianchi casi se lo mandó a la hoguera… por parte de «la sublime casta política «.
¿Y ahora; que hacemos con Marcelito?
Un laburante; dedicado en los últimos años más a la tele que a laburar. No estamos diciendo que no trabajara un poquito.
La prensa capitalina señala que Marcelo Abdala chocó alcoholizado – antes en el barrio; le decíamos borracho – en Punta Carretas; en horas de la tarde de este viernes.
Habrá que preguntarse o no… que medidas va a tomar el PIT CNT; con estos personajes que cada día representan menos al obrero genuino; al verdadero laburante; y son parte – punteros de una «trama política»; hoy sin caretas; y que «hacen carrera» manipulando a las masas con huecas filosofías; ideologías de importación; discursos disfrazados de progresismo; pero viviendo «en una zona» – llámese de confort – bien alejada del pueblo.
Marcelo Abdala, se accidentó este viernes en su auto.
En el lugar, al dirigente sindical – presidente del PIT CNT – se le realizó una espirometría que arrojó un resultado de 1,53 gramos de alcohol en sangre.
Según lo consignó el informe de Teledoce; el accidente se produjo en horas de la tarde en Bulevar Artigas casi García Cortinas, en el barrio Punta Carretas (Montevideo). Abdala chocó con dos autos que estaban estacionados.
Abdala fue dirigido al Centro de Constatación Médica al Prado y después a la Seccional 5 en Salterain y Canelones.
Cuando llegó la Policía -informó la Tele- encontraron que el auto del sindicalista estaba vacío.
A unos 20 metros vieron dos personas que caminaban de forma errática y les preguntaron si ellos habían sido quienes eran los protagonistas del siniestro de tránsito a lo que ambos reconocieron que sí.
Tan lamentable; como real.
Esta es la gente – como tantos otros y de todos los colores – que están al frente de entes ; instituciones; partidos; y que tú de manera sumisa permites que digiten tu vida; te «gobiernen» ; cuando en un alto porcentaje no saben como gobernar sus vidas.
Míralo y ponéle el color según el cristal con que lo mires. «Contálo como quieras», dicen los pibes ahora.
Pero la cruda; dura y lamentable realidad es ésta.
Alex Hernández