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Debut gris de Uruguay ante una entusiasta Korea

URUGUAY MAQUILLA UNA POBRE PRESENTACIÓN CON UN CABEZAZO DE GODIN Y UN REMATE DE VALVERDE

Uruguay – Korea jugaron un partido equilibrado en el comienzo, con Uruguay demasiado replegado ante una Korea activa pero sin inquietar sobre el arco de Rochet.
En 20 minutos ninguno logra un juego fluido como para llegar de cara al gol.

Uruguay logra sorprender en las «dos jugadas» más peligrosas – dos pelotazos cruzados – ante pérdidas infantiles en ofensiva del equipo coreano qué al irse al ataque o querer anticipar en alguna pelota queda mal parado.

30′ minutos con Uruguay muy metido en su campo, lento, anodino.

Korea sin ser demasiado controla el balón; – y le quita un protagonismo ausente de Uruguay -y a los 33 minutos se devora el primero frente al arco de Rochet.

Korea le perdona la vida a Uruguay cuando los defensores celestes miraban al delantero coreano.

Final del primer tiempo donde Korea tuvo pelota, precisión, velocidad, poca «pegada»; Uruguay en lo futbolístico poco, solo dos pelotazos y pelota quieta, pudieron hacer la diferencia, pero colectivamente sin aparecer. Algunos problemas en la mitad, ante la velocidad coreana, lo que generó problemas a espaldas de los dos laterales que en definitiva tampoco desentonaron.
Sobre el final el cabezazo de Godín que pudo poner el 1 – 0 qué tal vez no hubiera sido lo mas justo.

Primera mitad de un juego 5/10 puntos. Pocas ideas.

SEGUNDA PARTE SIN MEJORAS

Segundo tiempo con similares características a lo que fue la primera parte ninguno de los dos equipos remataron ni se acercaron a los arcos en 20′ lo que marca el nivel del juego. Ingresa Cavani. Algo mas de movilidad pero lo que generó Uruguay no dio para distinciones.

Sobre los 30′ el partido entra en una meseta, trámite discreto de digerir para todo futbolero de ley. Ingresan – tarde De La Cruz – y Viña, no entendimos. Habrá que ver si estaba sentido o lesionado Matías Olivera que había sido de lo mejor en Uruguay incluso soltándose por el lateral por momentos.

Se entiende poco el planteo de Alonso y la disposición del equipo en el campo menos.
Un equipo donde nos jactamos del «cinturón de la mitad», que estuvo lento , sin desprenderse, monótono, y allí es donde tiene que tallar «la disposición tecnico-táctica» desde afuera.

A los 81 minutos aparece Cavani descarga con Darwin Núñez primer remate al arco de Uruguay en la segunda parte.

Muestra clara de una disposición muy conservadora para estar jugando con Korea, recepción del balón solo en 40′ de Cavani mira y no tiene con quién jugar a sus costados – rodeado por 5 coreanos – y tiene que volver la pelota hacia nuestra área para comenzar de nuevo. Ingresa a Varela por Pellistri – otro cambio que no entendemos – teniendo jugadores en el banco con características acordes para ocupar las bandas o posicionarse un poco más en ofensiva.

Desconcertante lo de Alonso al que solo pudo salvar una individualidad – cómo ha pasado a lo largo de toda la historia de nuestro fútbol -, y vaya si pudo ser el zapatazo de Valverde a los 89′.

En 90 minutos casi en el final un grosero error de Rochet que casi termina de cerrar un pobre juego celeste en el debut, encajando un gol.

Final: fue empate 0-0 buen negocio para Korea, poco lo Uruguay ,mucho para mejorar. Matías Olivera que salió vaya a saber porque lo más parejito en el fondo, Cáceres nunca decepciona, un medio campo muy estático, un Valverde que en la mitad apareció en cuentagotas y es el más importante hoy por hoy.

Poca generación para los de arriba qué se dedican más a marcar que ha elaborar y después muy pocas ideas en el colectivo.
Un equipo coreano que sin ser nada del otro mundo, aplicado, con velocidad y precisión , pudo en algún momento complicar.

Un debut más agrio que dulce, habrá que ver si hay variantes en los próximos juegos de Uruguay.

Que hay que mejorar y mucho, no hay dudas, y por sobre todas las cosas, ver como se posiciona en el terreno de juego.
Una vez mas, decir que, hay madera, que no vuelva a fallar «el carpintero.

Hace años que en un futbol decadente a nivel internacional , hemos dejado pasar oportunidades, con generaciones Clase A, que pudieron lograr mas, pero se han visto «atadas», y desaprovechadas por no tomar riesgos. Buscar «algo más». Ojalá no nos vuelva a pasar.

Alex Hernandez