Fuentes dela cartera dijeron a El Observador que la opinión de la exministra no refleja la posición del Ministerio y que no realizarán declaraciones sobre el tema ya que el caso está en el ámbito de la Justicia.
Sin embargo, las declaraciones de la presidenta de ASSE y exministra de Salud Pública sobre quién debía resolver el caso fueron opuestas a la postura que las autoridades del MSP tomaron frente a este tema.
“Nosotros no somos quienes tenemos las potestades para decidir sobre la niña, por lo tanto hay un juez que va a ser quien tome la decisión”, dijo la presidenta de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Susana Muñiz consultada sobre el caso de la pequeña que cumplió ayer 12 años, que quedó embarazada luego de haber sido violada por un hombre de 41.
A pesar de esa declaración, Muñiz opinó que “una niña no está preparada desde el punto de vista orgánico” para llevar adelante un embarazo. “El útero no está preparado, no se terminó de desarrollar. Eso expone a riesgo de aborto espontáneo, a estados de hipertensión”, agregó.
El MSP participó del caso a fines de abril, cuando en una reunión de los equipos que atendieron a la niña resolvieron los motivos por los que había que seguir con el embarazo. Según publicó La Diaria el jueves, la coordinadora del Área de Salud Sexual y Reproductiva del MSP, Ana Visconti, dijo en esa reunión que “la talla y el peso de la niña no son menores que los de otro embarazo adolescente”, un motivo, según la especialista, para que continuara con el embarazo.
De hecho, luego de que la jueza Raquel Gini resolviera que no le correspondía a ella sino a los médicos, junto con la niña y su madre decidir si podía interrumpirse el embarazo porque había pasado las 14 semanas de gestación y, por tanto, estaba por fuera de lo que dispone la legislación, los médicos acordaron que no se interrumpiría.
La pequeña continúa internada en el Centro Hospitalario Pereira Rossell y cuando sea dada de alta pasará a vivir en una dependencia del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU). La presidenta del organismo, Marisa Lindner, prefirió no dar detalles a El Observador sobre qué pasará con el niño cuando nazca. “Se comenzará un proceso de trabajo para poder acompañar (a la niña) en un proceso que es muy complejo”, sostuvo.
El jueves Lindner había dicho en una conferencia de prensa se manejaba la posibilidad de que la menor pasara a vivir en un hogar para madres adolescentes, luego del nacimiento del bebé.