EL BOLETO SIEMPRE LE TOCABA A LA MISMA PERSONA.
Los viajes del ex secretario de la Presidencia y una contadora de la Secretaría Antilavado que fueron archivados por la Jutep.
Por PATRICIA MADRID – La Junta de Transparencia y Ética Pública (Jutep) archivó a comienzos de 2020 una investigación que se generó luego de que el organismo recibió, a través de una denuncia anónima, la advertencia de una serie de viajes realizados en 2019 por el ex secretario de la Presidencia, Miguel Angel Toma, junto a una joven contadora integrante de la Secretaría Nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo (Senaclaft).
Esta historia comienza con un nombre: Giuliana Pérez. Pérez firmó su título de Contadora Pública por la Universidad de la República el 4 de diciembre de 2018, de acuerdo a lo que ella misma divulgó en sus redes sociales.
En abril de 2019, Pérez -recomendada por Toma, según pudo saber Así Nos Va- ingresó a trabajar en la Secretaría Nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo (Senaclaft) junto a otro joven contador, ambos con contrato temporal aprobado por Presidencia de la República.
En julio de 2019, Toma informó a la Senaclaft que la contadora Pérez -que se dedicaba a tareas administrativas- formaría parte de la comitiva de Presidencia en el viaje que se realizaría a la ciudad de Roma (Italia) en el marco de la causa del Plan Cóndor. Pérez viajó a pedido expreso de Toma porque, al parecer, la joven contadora podía analizar si los involucrados en la causa del Plan Cóndor habían cometido “financiamiento de terrorismo de Estado”. En la Senaclaft hubo caras de sorpresa, dijeron las fuentes consultadas por Así Nos Va, ya que el organismo dedicado a la lucha contra el lavado de activos contaba con distintos profesionales contadores, con más años y experiencia en la labor.
Presidencia de la República compró tres pasajes para el viaje que se desarrollaría entre el 4 y el 11 de julio de 2019. Un pasaje se compró para el secretario de la Presidencia, Miguel Angel Toma (viaje en clase ejecutiva por U$S 6.265) y dos pasajes en económica valor cada uno U$S 1.795 (uno era para la contadora Pérez y el otro para la escribana María Antonella Introini, quien se desempeñaba como asesora en la Secretaría de la Presidencia de la República). Este viaje no figura entre las Misiones Oficiales del mes publicadas en la página web de Presidencia de la República, según constató Así Nos Va, aunque sí en las redes sociales de la contadora Pérez.
Un mes después, entre el 25 y el 31 de agosto de 2019, Toma vuelve a subirse a un avión -en clase ejecutiva- con destino a Washington DC (Estados Unidos). El motivo del viaje fueron las reuniones que se llevarían adelante con motivo del proceso arbitral ante la Corte Permanente de Arbitraje iniciado por Aratirí. Presidencia abonó por este pasaje U$S 6.355, según constató Así Nos Va. De acuerdo a la web de Compras Estatales, estaba previsto que tanto la contadora Pérez como la escribana Introini viajaran junto al secretario de la Presidencia pero el vuelo de ambas se pospuso para el 2 de septiembre. Así fue que los pasajes de ambas -en clase económica- se reasignaron entre el 2 y el 7 septiembre y Presidencia pagó por estos traslados U$S 2.972 en total, de acuerdo a lo que figura en la web de compras estatales. Este viaje sí figura entre las Misiones Oficiales del mes publicadas en la página web de Presidencia de la República, según constató Así Nos Va.
En noviembre de 2019, Toma y Pérez vuelven a viajar a Washington DC por el caso Aratirí. Una escapada fugaz, entre el 18 y el 23 de ese mes. Presidencia pagó por ambos pasajes U$S 2.525 ya que habían quedado pasajes abiertos y solo hubo que pagar una diferencia de precios. Este viaje también fue publicado entre las Misiones Oficiales del mes en la página web de Presidencia de la República, según constató Así Nos Va.
Y en diciembre de 2019, Toma y Pérez repiten viaje en conjunto pero esta vez a la ciudad de Roma, entre el 9 y el 14 de diciembre, nuevamente por la causa del Plan Cóndor. Presidencia pagó un total de U$S 8.975 en pasajes (Toma vuelve a viajar en clase ejecutiva con un boleto de U$S 6.780), de acuerdo a lo que figura en la web de compras estatales. Si bien este viaje también fue publicado entre las Misiones Oficiales del mes en la página web de Presidencia de la República, cuando se quiere ingresar al detalle de la misión aparece “Error 404” según constató Así Nos Va.
El último viaje de Toma junto con la contadora Pérez tuvo lugar este año, entre el 17 y el 23 de enero. Viajaron nuevamente a Washington DC por el caso Aratirí: Toma en clase ejecutiva y Pérez en económica. Presidencia paga en total US$9.715 por los dos pasajes.
Inmensas dudas
Los viajes realizados por Toma junto a la contadora Pérez, y las dudas respecto a su efectiva participación técnico-profesional en ambas causas -la del Plan Cóndor en Italia y la de Aratirí en Estados Unidos- llegó a la Junta de Transparencia y Ética Pública (Jutep) sobre fines de 2019, bajo el formato de “denuncia anónima”. La Jutep tomó el caso, y solicitó a Presidencia de la República una ampliación de la información.
Terminó el año y la respuesta de Presidencia no había llegado. Llegó recién la primera semana de enero de 2020. Diego Pastorin, quien ocupaba el cargo de Director General de Presidencia, respondió a la Jutep -haciendo alusión a lo contestado por Toma- el detalle de cada viaje en el que participó Pérez, las autorizaciones de Presidencia de la República, los gastos de pasajes, etc.
¿Qué hizo la Jutep? Así Nos Va pudo saber que dos de los miembros del organismo -Daniel Borrelli y Matilde Rodríguez- resolvieron, una semana después de recibir la respuesta de Presidencia, archivar la investigación por entender que las consultas habían sido evacuadas.
El tercer integrante de la Jutep y quien presidía el organismo, Ricardo Gil Iribarne, estuvo de vacaciones la primera quincena del año y al regresar de su licencia se enteró del trámite que había tenido el expediente. Así fue que en la sesión de la Jutep del 22 de enero, Gil Iribarne dejó constancia en actas que no estaba de acuerdo con que se resolviera archivar la investigación, por entender que en la respuesta de Presidencia faltaban elementos que explicaran la presencia de la contadora Pérez en esos viajes.