El pastor evangelista Luis Palau murió este jueves en Estados Unidos a los 86 años. La noticia fue comunicada por la asociación que lleva su nombre, que indicó que murió en su casa en Portland, en el estado de Oregon (Estados Unidos), luego de “una batalla de tres años contra el cáncer de pulmón en etapa IV”.
El documento recuerda a su vez el enorme alcance que llegó a tener Palau como predicador: “Escribió más de 50 libros y habló en forma personal en más de 500 eventos masivos en 80 naciones del mundo alcanzando a millones de personas, cara a cara, con el mensaje cristiano”, indica un pasaje del documento.
Gracias a su gran influencia, también fue recibido por presidentes, empresarios, periodistas, representantes de la nobleza y distintos líderes mundiales.
“Partió con el Señor el Evangelista Luis Palau. A través de las campañas y eventos masivos realizados en decenas de países y ciudades del mundo, millones de personas conocieron del amor de Jesús. Oramos por su familia y equipo de servicio, que sean fortalecidos con nuevas fuerzas”, señaló por su parte en sus redes sociales Osvaldo Carnival, pastor de Catedral de la Fe.
Nacido en Buenos Aires el 27 de noviembre de 1934, en 1946 se convirtió al evangelismo luego de asistir a un templo protestante. Años después, viajó a Estados Unidos para estudiar el seminario Multnomah School of the Bible, en Portland, ciudad norteamericana en la que se estableció y permaneció el resto de su vida.
La Asociación Luis Palau recuerda que durante los años 70 y 80, el evangelista argentino “fue uno de los pocos predicadores extranjeros autorizados a realizar eventos de carácter espiritual dentro de la antigua Unión Soviética”. “Cuando en 1991 cayó la `Cortina de Hierro´, fue uno de los primeros en realizar campañas en estadios al aire libre en la región. Campañas similares en naciones aparentemente `cerradas al cristianismo´en el Medio Oriente y Asia también ayudaron a derribar barreras y establecer nuevos estándares para los esfuerzos de evangelización masiva”.
Sus históricos eventos masivos lograron congregar a millones de personas en todo el mundo. En su presentación en Buenos Aires, en 2008, la prensa secular local indicó que la primera noche asistió medió millón de personas, y un millón en la segunda. En Lima, en tanto, llegó a reunir a cerca de 700.000 fieles.